Tradiciones castellanas: El colacho
Este fin de semana han venido a visitarme unos amigos que hace tiempo que no veía. Las conversaciones con las que han regalado a mis oídos han sido de lo más diversas. Entre ellas hemos hablado en varias ocasiones sobre lo que pasa en Castilla en cuanto a tradiciones y cultura popular se refiere.
Para poner mi granito de arena en recordar nuestras tradiciones pongo la noticia de lo que sucedió ayer en Castrillo de Murcia (Burgos).
El Colacho volvió a fustigar a los visitantes en Castrillo de Murcia
Este domingo el popular y malvado Colacho ha vuelto a hacer de las suyas, y ha sacudido con su látigo a los asistentes a la fiesta que lleva su nombre, y que está declarada de Interés Turístico Nacional.
El día grande de la fiesta de El Colacho en la localidad de Castrillo de Murcia (Burgos) se celebró ante la presencia de cientos de visitantes que acompañaron a los vecinos, siempre en torno a las figuras de El Colacho y el Atabalero.
Durante toda la jornada, El Colacho que representa al 'Mal', acompañado por el ritmo del tambor que toca El Atabalero, realiza 'corridas' por las calles de la localidad intentando fustigar con una cola de caballo a los vecinos y visitantes, que le insultan.
Fue durante la tarde, cuando se escenificó la derrota del Mal, el momento en el que El Colacho se despojó de la máscara y huyó saltando por encima de los niños nacidos en el último año, a los que libera así de los males. (…)
(…)«El municipio de Castrillo de Murcia tiene ahora algo más de 200 habitantes y ha sufrido los males de la emigración y el envejecimiento de los vecinos, por lo que se da cabida en la Cofradía a nacidos en el pueblo que ya no viven allí e incluso a personas como yo mismo, que estoy casado con una mujer de Castrillo», explicó Hilario Aparicio.
Resto de la noticia aquí
Para conocer más sobre el colacho y su origen precristiano e incluso las mutilaciones culturales que la iglesia llevo a cabo con la fiesta se puede consultar este enlace
Mis amigos y yo comentábamos la tristeza que nos produce que debido a la despoblación, la dejadez de las instituciones y, tal vez, a la naturaleza de los castellanos que llegamos a avergonzarnos de esa cultura popular identificándolo con algo pueblerino. Esto último da incluso más rabia cuando comparamos lo que sucede en otras regiones. En el País Vasco, por ejemplo, los dantzaris están muy bien considerados e incluso tienen un baile de homenaje que utilizan en cada fiesta. En Cataluña por su parte, cada domingo, frente a la catedral, se bailan sardanas populares donde todos pueden participar y aprender a bailarlas. Nosotros en muchas ocasiones nos reímos de las pintas de nuestros danzantes o de la gente que sale a bailar jotas, seguidillas o rondas en las fiestas, como muestra este recopilatorio de grupos.
Ojala que pronto, antes que sea demasiado tarde, tanto la administración como los mismo ciudadanos pongan interés, no ya en recuperar que sería lo mejor, sino en no dejar perder lo que nos queda. Esperemos que tradiciones menos vistosas pero de gran interés por su historia o su significado no terminen desapareciendo.
¿Conocéis alguna tradición que está desapareciendo o corra riesgo de hacerlo en nuestra tierra? ¿Os parece importante protegerlas? ¿Qué haríais para conservarlas?
No hay comentarios:
Publicar un comentario